lunes, 7 de diciembre de 2009

Decían que yo no podía enseñar. Hoy, soy supervisora


Durante mucho tiempo, tuve que disimular que me estaba quedando ciega. Pensaba que, además de perder la vista, iba a perder mi fuente de trabajo. Entonces andaba por la escuela sin bastón, aprendiendo los caminos en silencio, a los tumbos por la calle. Fue muy difícil. Pero, gracias al esfuerzo, ahora soy Supervisora.

Cuando asumió como Directora, ¿cuáles fueron los desafíos?
Fueron muchos; yo venía de trabajar 28 años con niños y de encontrarme con adultos y, además, con la orientación de formación laboral, para mí era muy distinto. Me puse a estudiar mucho, me preparé especialmente, porque yo era la única docente ciega de esa escuela, y eso era «correr con desventajas». Yo tenía que poder demostrar que sabía hacer mi trabajo y ser lo suficientemente independiente, firme y eficiente.

Inés Enjo es supervisora escolar del área «Ciegos» en la Ciudad de Buenos Aires, la primera en América Latina que, siendo ciega, ejerce ese cargo.

Leer entrevista completa aquí Miradas a la educación. Revista Plural-Singular Año 2 Nº 38 Ministerio de Educación, Ciudad de Buenos Aires.

2 comentarios:

Anónimo 9 de diciembre de 2009, 23:10  

Una gistoria conmovedora. Demuestra que todo se puede.

armandotramas.blogspot.com 11 de diciembre de 2009, 23:28  

Una excelente profesional!